Si hablamos de superar traumas es normal que nos venga a la cabeza situaciones muy duras experimentadas en la vida, como abusos o fallecimientos.
Sin embargo, más allá de lo que todos entendemos, una vivencia traumática es el resultado de toda experiencia desbordante a nivel emocional donde nos hemos sentidos indefensos, faltos de recursos para integrar dicha vivencia o en la que no hemos tenido en su momento la ayuda necesaria para afrontarla.
Al contrario de lo que muchos piensan, un trauma puede suceder en cualquier momento de la vida, no sólo en la infancia. Independientemente del momento, estas experiencias del pasado condicionan nuestro presente.